Hoy es el día internacional de la felicidad.
Y hoy, desde esta maravilla de paisaje rememoro que hace dos años que defendí mi tesis doctoral y me convertí oficialmente en doctora. Terminar mi doctorado en 2014 abrió una nueva etapa en mi vida personal y profesional que ha supuesto un cambio de ciudad, un cambio de trabajo y, en definitiva, un cambio de vida.
Ahora vivo en Madrid y trabajo en una escuela de negocios de ámbito internacional, la primera escuela fundada en Europa en 1819, y una de las más antiguas del mundo. Tras 6 meses aquí no puedo decir más que el reto a afrontar ha sido intenso y a la vez satisfactorio, me ha permitido aprender mucho y crecer de nuevo en lo profesional y en lo personal. Dejé gente estupenda atrás, pero he encontrado compañeros y amigos estupendos en el nuevo camino. Para una curiosa impenitente como yo, que se mantiene viva aprendiendo cada día, estar rodeada de compañeros proactivos, haber encontrado mentores y personas de gran calidad humana es muy importante.
Por ello finalmente me decido a abrir el blog en mi web. Lo he pensado mucho, sobre todo porque quiero al abrirlo actualizarlo con regularidad y siempre está el riesgo de la falta de tiempo. Sin embargo, me hallo decidida a encontrar el tiempo necesario y compartir mis experiencias como facilitadora de conocimiento (no me gusta la palabra profesora) y como investigadora. Recogeré en este espacio todos aquellos temas o noticias que me parezcan interesantes relacionadas con marketing digital, el comportamiento humano, la música y el resto de las artes, y la gestión cultural. Veremos qué sale del intento.
Bienvenidos a mi espacio, ese donde se difumina la barrera entre lo profesional y lo personal.